Los terapeutas ocupacionales desempeñan un papel importante en el sistema sanitario. Ayudan a las personas que han sufrido lesiones o accidentes cerebrovasculares a mejorar su capacidad de actuar y moverse y a recuperar su independencia. Trabajan con los pacientes para enseñarles a andar, vestirse, comer o realizar actividades cotidianas. Los terapeutas ocupacionales trabajan tanto con niños como con personas mayores, por ejemplo tras fracturas óseas, con artrosis o con la enfermedad de Parkinson.
La demanda de tratamientos de terapia ocupacional va en aumento. Esto se debe a que la población envejece cada vez más, mientras que los trastornos del desarrollo en los niños también van en aumento. Sin embargo, en Alemania hay muy pocos jóvenes que se dediquen a esta profesión. La escasez de especialistas en el campo de la terapia ocupacional es tan dramática como en enfermería y fisioterapia. Esto provoca largos tiempos de espera para los pacientes y una mala situación de la oferta.
Por ello, en TalentOrange hemos empezado a contratar a terapeutas ocupacionales extranjeros. Aprovechamos nuestra larga experiencia en la selección y formación de personal de enfermería internacional. Ambas profesiones requieren el reconocimiento estatal y un periodo de adaptación con el nuevo empleador en Alemania.
Luis Daniel Romero Guerrero, de Colombia, es uno de nuestros primeros terapeutas ocupacionales. Desde mayo de 2024 trabaja en el geriátrico y en la clínica de día del St. Vinzenz-Krankenhaus Hanau. El equipo de terapeutas está formado por un total de 22 empleados, tanto fisioterapeutas como terapeutas ocupacionales. Actualmente, dos especialistas internacionales están completando su acreditación en el equipo terapéutico de St. Vinzenz. Luis Daniel Romero Guerrero es uno de ellos. Le encanta su trabajo. En Cali, en la Universidad del Valle, una de las más prestigiosas del país, fue uno de los mejores graduados de su promoción con una licenciatura en terapia ocupacional. Al mismo tiempo, empezó a aprender idiomas porque quería trabajar algún día en el extranjero. Con el programa TalentOrange, aprobó el examen B2 de alemán. Ahora vive en Hanau y está contento de haberse trasladado a Alemania. Sus pacientes le agradecen su empatía, amabilidad y paciencia. Aquí está practicando con un paciente el movimiento desde la articulación del hombro. «Lo hace muy bien», dice la mujer. Luis Daniel sonríe y le devuelve el elogio directamente. Trabaja con entre ocho y diez pacientes al día. Sospechamos que bastantes de ellos ya le han cogido cariño al poco tiempo.